Jugar con la comida, hacer de ella una obra de arte… de la imagen más estética a la más golosa pasando por la que más gotea y la más minimalista. La comida supera sus funciones primarias y se convierte en una expresión creativa.

¿Hasta dónde llegaremos en esta búsqueda del placer?

Ya no nos alimentamos para vivir, sino que vivimos para alimentarnos. La excesiva presión, la crisis… intentamos escaparnos de una rutina que nos oprime, así que nos permitimos algunos momentos OFF, un paréntesis sin privación.

Llegó la generación foodporn, aquella que alcanza al éxtasis al ver comida y que se pasa el tiempo mirando recetas, blogs (Tasty, Buzzfeed food), Top Chef… la comida nos alegra la vista. ¡Bienvenidos a la época donde lo bueno también es bello!

Fat and Furious Burgers, el site alto en calorías

Patissez se ha creado una reputación internacional gracias a sus increíbles batidos.

Por cierto, esta pequeña pastelería de Canberra también tiene los suyos, los denominados Freakshakes.

Eres lo que fotografías

Aquí todos somos golosos y en las redes sociales se ha creado mucha competencia entre los del sector del comer bien. Sonic (cadena de fastfood) incluso creó unos batidos cuadrados para subir la instantánea perfecta a Instagram.

Ya sea en casa, en el restaurante de la esquina o en un oasis perdido, el hecho de que fotografiemos nuestro plato indica que nos fascina la comida. Consumir algo «normal» ya no es suficiente.

Olive Hummer

Después del multicolor llega el look Galaxy

Adiós a lo industrial, hola al DIY

Antes era la abuela la que compartía sus secretos culinarios alrededor del fuego. Ahora hemos cambiado el libro de recetas por tutoriales de Internet y fotos disponibles las 24 horas.

Gracias a plataformas como Pinterest, hoy en día es fácil escenificar y compartir nuestros platos. Hay que atreverse a tunear nuestro plato de pasta o a preparar una receta trans como brookie, cronut…

Esta tendencia (si aún no ha superado el estado de tendencia) se explota, naturalmente, en el marketing. Nuestros packagings cambian sus alegatos para crear imágenes apetecibles.

Experiencia sensorial

Sin duda, el packaging siempre ha tenido en cuenta la puesta en escena de los ingredientes, pero hoy la naturaleza se vuelve protagonista. El alimento posa (¿casi eróticamente?).

Superlativos

¡EXTRA, ULTRA, GIANT, OMG!

Destacamos el ingrediente de manera excesiva. A veces, la imagen sustituye a las palabras.

Show: poses sencillas para pausas golosas

Dale un mordisco: nos encanta la naturaleza muerta de Ekselence.

Fiiirmes!

A la barbacoa… ¿Cómo resistirse?

Un carnicero que vende zanahorias y lentejas

Plano cenital, Instagram style

Alimentos en posturas sugerentes, Tcho, qué hot…

Glossy

Espíritu vintage

Cookie mafia: los gánsteres gourmet trafican sin gluten

¡Hey, Stripper! Las botellas y los briks llenos de frutas se rebelan…

Explosión de place…reza

Bases de pizza y pita, baby!

Orgía: cuando lo obsceno se convierte en delicioso.

Casi real y tan delicioso…

El champiñón, tan cómodo frente al objetivo.

El producto en una vitrina

Pulpa sensual

Fruits do it better!

Trash: estilo experimental, atreverse y sorprender

Una pizarra llena de sabor. Con Oumph se nos hace la boca agua.

Salchicha bondage y rojo sangre.

Krasnagorie quiere decir «montañas rojas». De hecho, el dibujo es una ilusión óptica, mirad más de cerca…

Gravedad cero

Atención, fruta sexy para el calor.

El Agent Provocateur de los helados… tan bueno que escandaliza.

Delicado

Fiesta en el pastel

Cómo no hacer una puesta en escena.

Foodporn…. ¡El espectáculo está en el plato!